El renting es un contrato de arrendamiento de bienes a largo plazo, generalmente de entre 25 a 60 meses.
La empresa de renting adquiere o dispone del bien y mediante un contrato la arrienda al cliente durante un plazo determinado.
Los bienes susceptibles de contratación mediante renting son generalmente bienes con alta depreciación y de inversión elevada: vehículos, maquinaría, equipos tecnológicos, etc.
El contrato de renting puede traer asociados ciertos servicios y coberturas, como por ejemplo en el caso de automóviles, incluyen el seguro, el pago de impuestos, el mantenimiento y la reparación de averías, cambio de ruedas, etc. por lo que el cliente únicamente tiene que hacerse cargo del pago de la cuota y el combustible.
Esto permite al cliente controlar los gastos al evitar los imprevistos.
El renting puede contemplar o no la opción de compra del activo una vez acabado el contrato. En este caso se establece un precio residual.
El renting permite hacerse con activos de gran valor sin endeudarse, manteniendo nuestra capacidad de endeudamiento para otras inversiones.
También evitamos cargas financieras implicitas a las fluctuaciones de los tipos de interés y obtenemos deducciones fiscales, en la declaración del IVA y el Impuesto de Sociedades.
Para establecer un contrato de renting óptimo y con los máximos beneficios de rendimiento para el cliente es fundamental contar con profesionales especializados en renting, MultiRentings pone a su disposición toda su experiencia para este cometido.
